Las Naves de invernáculos son provistas de dimensiones base en vanos de 7m o 10m, en alturas laterales y cenitales de 3m y 5m, respectivamente, permitiendo armarlos de cualquier longitud, siendo acoplables lateralmente para lograr anchos “multicapilla” de forma tal de cubrir los requerimientos que así lo necesite el usuario.
Los kits están compuestos por una estructura modular de acero galvanizado y acoplable, y si el usuario así lo requiere se pueden anexar los distintos sistemas asociados que posibilitan y potencian el crecimiento vegetal en su interior. Dichos sistemas que pueden acompañar los invernáculos son el manejo de la ventilación, ya sea natural o forzada; la circulación de aire interno, la climatización automática, sistemas de fertirriego, mesas de cultivo, malla de oscurecimiento, iluminación artificial complementaria, recuperación de agua de lluvia, cubierta antigranizo, y una estación de bombeo centralizado para cubrir las necesidades de los riegos.
